lunes, 2 de noviembre de 2009

Ella, observadora

Miraba a la gente pasar de lejos,
inventaba en su cabeza miles de posibles vidas para ellos.
Vidas mágicas, llenas de historias fantásticas
que acaban con su respectivo y fueron felices para siempre.
Para ella no era complicado hacerlo,
un par de zapatos le inspiraban toda una historia de amor y pasión
de esas que nunca había tenido, porque la vida es así de perra.
Da ilusión y ganas de vivir a quien no tiene una vida agradable
y hace quejicas y desgraciados a quienes lo tienen todo...

1 comentario: