y de repente aparece él

Se habian conocido hace tiempo,
pero Alice nunca le había prestado demasiada atención.
¿Y entonces, por qué se sentía así ahora?
Tal vez porque es un momento extraño de su vida
o puede que por su forma de mirarla,
o porque con él era ella realmente,
sin mascaras, sin falsos nombres, sin falsas aficiones,
simplemente Alice, en mayúsculas.
Quién se lo iba a decir a Alice cuando los presentaron
que de repente iba a aparecer él ahí,
como un salvador,
como la luz al final del tunel,
como una puerta de salida a su vida de moteles y pensiones.
Qué raro es esto de la vida,
un día te quieres morir,
y al siguiente lo ves todo color rosas

Puta espiral de sentimientos...

besos

y en ese momento sus labios y los mios se encuentran
y él me besa, y yo me dejo besar
y, como siempre, la manos van al pan
y, para variar, terminamos dándo vuetas de campana
bajo las blancas sábanas de cualquier motel
perdiendo la noción del tiempo
y del espacio
disfrutando y sintiendo
como si ese segundo fuera el último

porque la vida se cuenta por los momentos que te dejan sin respiración...

Sonrie, por favor

¿Por qué estás triste?
¿Por qué no debería estarlo?
Porque sigues viva
¿De verdad? Hay veces que lo dudo
¿Sientes?
Dolor, mucho dolor, siento un vacío en el pecho que no puedo llenar con nada, con nadie
Pero sientes, por tanto, estás viva
Entonces, si esto es la vida, prefiero no vivir

Llegó a casa, se metió en la bañera y el líquido inflamable comenzó a recorrerle las venas hasta que perdió el sentido...

correr y correr, como si te fuera la vida en ello

Iba andando por la calle,
una calle normal y corriente
por la que paso todos los días del año
durante los 18 años de mi vida
pero hoy las calles no me parecen iguales
y necesito correr, huir de ellas.
y eso es lo que hago, correr, muy rápido
hasta casi perder el sentido
pero siento que no puedo escapar
y los fantas de tu ausencia me persiguen
dejando rastros de ti en cada esquina








supongo que estás navidades van a ser extrañas para todos

segundos

Estoy a dos segundos de rozar tus labios,

siento tu aliento en mi piel,

se me eriza el vello al pensar a que sabrá tu boca.

Respiro, aspiro, quiero sentir tu olor en mi piel.

Te acaricio, suave, con el dorso de a mano

tú te pierdes en mis susurros

Me besas, por fin, te siento, me sientes

y entonces y sólo entonces

desgarro la piel de tu cuello y me bebo tu vida

miedos

-necesito ayuda
-¿por qué?¿qué te ocurre?
-por favor, no preguntes, solo necesito un sitio donde esconderme
-¿esconderte? ¿de qué?
-de mi misma



¿dónde vas cuándo huyes de tus miedos?